El Game Pass de Xbox solo beneficia a la propia Xbox, o mejor dicho, a Microsoft; porque ni si quiera creo que a largo plazo esto vaya a suponer algo positivo para Xbox. Y es que un servicio que va contra sus propios usuarios no puede terminar más que fracasando.
Sé que hay muchos fervientes seguidores del Game Pass, la inmensa mayoría de ellos defienden el servicio tras haber pagado 1€ por él y saber que lo van a tener mantener 1 o 2 años más hasta que finalice la promoción que inicio Xbox para tratar de colar su servicio en medio mundo. Cuando caduque esta oferta ya veremos cuántos de estos usuarios siguen pensando igual y apoquinan un mínimo de 10 euros al mes para seguir disfrutando de su catálogo de juegos.
No me considero hater de Xbox precisamente, al contrario, la entrada de Xbox al mercado con la Xbox original es una de los mejores recuerdos que guardo. Pero sí que mantengo una postura muy defensiva desde mi posición de consumidor frente a cualquier modelo de SaaS -Software as a Service-, que es lo que es Xbox Game Pass. Un servicio de software por el que Xbox te alquila de forma limitada el acceso a un determinado catálogo de videojuegos que solo les pertenece a ellos en ese determinado momento. Si pagas a final de mes sigues pudiendo acceder al servicio, si no, estás fuera y no podrás jugar a los juegos que estabas jugando. Además, remarco lo de “un determinado catálogo”, porque los juegos disponibles en el Game Pass van rotando mes tras mes. Lo que juegas hoy puede que el mes que viene ya no esté disponible, así que si quieres continuar tu partida tendrás que pasar por caja y comprar el juego completo, probablemente en formato digital porque en Xbox el formato físico ya sabemos que está poco menos que enterrado.
Como usuario profesional de Adobe que fui en su momento, y sé que hay más como yo en este foro, tengo claro lo que representa la esclavitud de un SaaS para el consumidor o usuario. Antes muchos usábamos herramientas de edición como Photoshop o Premiere, era lo mejor en su clase para trabajar. Sin embargo, Adobe decidió que le era más rentable alquilar su producto en lugar de vender una licencia para “toda la vida” (hasta que el usuario decidiera actualizar por las nuevas funciones de la versión posterior X). La compañía no tardó en aumentar exponencialmente su cotización en bolsa. Sin embargo, a cada día que pasaba éramos más los que nos íbamos de sus afiladas garras, compensándonos incluso la penitencia de tener que pasar por un periodo de formación para aprender a usar otras herramientas alternativas. Unos pocos años después, la competencia, empresas como Affinity o DaVinci, se han hecho con una base de usuarios profesionales que han ayudado a elevar su producto hasta tales cotas que ahora están por delante de lo que ofrece Adobe. Y todo manteniendo el sistema tradicional de venta de licencia de producto para toda la vida.
Quien sea profesional y haya pasado por algo similar sabrá reconocer porqué el Game Pass no es positivo para nadie, salvo para la propia Xbox/Microsoft (a corto plazo, a largo ya veremos como acaba la historia).
Pero claro, diréis algunos, aquí solo estoy hablando de dos partes, pero… ¿Y este modelo no puede beneficiar a los estudios de desarrollo?
Estupenda pregunta que pocos se suelen hacer. Mi respuesta es rotunda: No. Y paso a resumir mi punto de vista.
Xbox, o Microsoft mejor dicho, ha estado firmando grandes cheques en los últimos años para tratar de hacerse con estudios potentes de desarrollo de videojuegos en el mercado. Estudios que no tenían ningún tipo de relación o vinculación estrecha con la propia Microsoft (muy importante tener claro esto). Estas compras se tienen que rentabilizar. Microsoft es una empresa multimillonaria por el hecho de sacar grande rentabilidad a sus inversiones. No se dedica a labores de ONG. Por este motivo, todos los estudios terceros, ya sean compañías bajo nombres como Ubisoft, Square, Capcom, 2K… o estudios diminutos que buscan el éxito con indies de enorme calidad, todos deberán competir con los estudios de Xbox. Todos, sin excepción. Y deberán competir contra los estudios de Xbox, en la casa de Xbox, dentro de su sistema de Game Pass. Porque la propia Xbox está vendiendo su servicio de Game Pass por encima de su plataforma física. Tanto es así que en esta generación ni si quiera han optado por la vía de PS5 con una consola con lector y otra idéntica sin ella. Xbox ha ido más allá y ha diseñado una consola exclusivamente para colar el servicio en los hogares al menor precio posible. Porque ese es el objetivo de Xbox, por eso empezó a pelear por la desaparición del formato físico desde la salida de One y por la esclavitud a través de Internet obligatorio de sus usuarios.
Las compañías ajenas a Microsoft tienen que competir contra los propios juegos de Xbox, que salen de forma “gratuita” en el Game Pass el día uno. ¿Puede competir un triple A de Capcom o de CDProjekt con un first de Xbox, saliendo los primeros a 60-80€ y el último gratis día 1 en el Game Pass? Evidentemente no.
Pero… ¿Y los indies? Menos aún. Piensa que se trata de un conflicto de intereses. Todos los juegos que no son de Xbox compiten por la venta de los juegos que sí lo son, en casa de la propia Xbox, que digo en su casa, en dormitorio. La desventaja es terrible. Tanto que anula por completo la ventaja por la cual los indies han tenido tanto éxito en la última década: el precio.
Un indie podía competir contra un juego AAA porque el primero valía 20 euros a lo sumo y el último 60. Haciendo unas mecánicas de juego chulas y cuidando un poco el apartado estético y musical, los pequeños estudios de desarrollo podían competir contra los grandes y pensar en construir un sueño. Con Game Pass ese sueño se acaba.
Pensemos por un momento en Nintendo. Nintendo se la jugó hace algunos años optando por una vía diferente a la de PS/Xbox para poder hacerse un hueco en el que poder sobrevivir y seguir ofreciendo productos inolvidables a sus usuarios. Se la jugaron, pero les salió bien. Tanto es así que no hay más que mirar las ventas de Nintendo Switch para corroborarlo. El camino abierto timidamente en un inicio
con N64 y de forma decidida con Wii, les ha conducido al éxito actual. ¿Pero no han pagado un coste por el camino, incluso sus usuarios? Indudablemente sí.
Las plataformas de Nintendo llevan varias generaciones que no reciben apenas juegos AAA de estudios terceros. Simplemente su planteamiento o es inviable por cuestiones de carencias técnicas de la consola de Nintendo o, lo que es peor, por economía. Y no porque el estudio no pueda permitirse hacer el port. No. Sino porque saben que su juego no va a vender en la plataforma de Nintendo. Al menos no lo suficiente para costear la inversión. Porque en Nintendo, solo vende Nintendo… Y ahora con Swich, también los indies. ¿Pero por qué aquí sí venderán los indies y en Xbox no? Muy sencillo, por el precio.
Los juegos de Nintendo salen y se mantienen durante años en su precio de salida, unos 50€. Los indies tienen un buen margen para poder competir contra los Pokemon, Zeldas y Marios de turno. Esta circunstancia se la carga Xbox con su Game Pass al permitir salir sus propios juegos día 1 de manera gratuita. Realmente Xbox ha construido un entorno del juego que solo les beneficia a ellos. Es un entorno hostil además, pues su forma de jugar no promociona que su plataforma pueda aportar algo extra al usuario frente a la competencia. No ofrece nada que no tenga PS. Nintendo Switch es la única portátil del mercado, solo esto ya cambia las circunstancias de forma radical. Xbox solo ofrece eso, un SaaS.
Tú decides que modelo apoyas.